z.system – Sistema de facturación, administración y contabilidad para estaciones de servicio – Control de surtidores Gilbarco y Wayne

El presidente de Energía Argentina SA (Enarsa), Hugo Balboa, anunció que el país comprará a Chile 276 millones de metros cúbicos (m3) de gas natural entre el 1 de junio y el 31 de agosto y reducirá en u$s 41 millones las importaciones de gasoil previstas por la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa). El precio estimado del contrato está en u$s 82,2 millones y se aprobará en la próxima reunión de directorio de Enarsa, que se realizará en los próximos días.

La importación diaria de 3 millones de m3 de gas de Chile se hará durante 92 días a través del gasoducto Gas Andes que corre entre la localidad chilena de San Bernardo y la mendocina La Mora y ayudará a reducir, al menos de forma marginal, el déficit comercial energético y satisfacer el consumo interno argentino en invierno.

El escenario que manejaba Enarsa por las importaciones de combustibles sin este contrato con Chile preveía un gasto de u$s 1730 millones, que resultan de la sumatoria de los u$s 317,7 millones de gas que se compra Bolivia, los u$s 324,8 millones que se pagan por los buques que llegan con Gas Natural Licuado (GNL) a la planta de regasificación de Bahía Blanca, los u$s 342,4 millones por el GNL a barcos que entran en Escobar y los u$s 745 millones por el gasoil que compra Cammesa. El nuevo arreglo con Chile sustituirá 290.000 m3 de gasoil de los 1.800.000 m3 que iba a pedir Cammesa.

Las compras que Argentina realiza en el exterior para cubrir su consumo totalizarán cerca de u$s 1689 millones en los próximos tres meses.

El año pasado, Argentina importó 363 millones de m3 de gas desde Chile, y volverá a comprarle al país trasandino debido a que Bolivia al igual que en 2016 no puede asegurar la normal provisión prevista en el contrato firmado en 2007, estipulado en 20,3 millones de m3 por día (1867,6 millones de m3 entre junio y agosto).

Ya en mayo de 2016, el Ministerio de Energía a cargo de Juan Aranguren decidió importar gas de Chile, dado que las autoridades bolivianas habían avisado que sería imposible cumplir con los volúmenes estipulados en el contrato (19,9 millones de m3 diarios). Así, Argentina tuvo que comprar el gas chileno a un precio 128% mayor que el boliviano y desató una polémica entre el senador nacional Fernando Pino Solanas, que lo denunció, y Aranguren.

Por otro lado, el ingeniero químico Balboa comunicó que Enarsa rescindió el contrato con la empresa Vertúa para la construcción del tramo entre Salta y Formosa del Gasoducto del Noreste Argentino (GNEA) por el abandono de las obras. En las próximas semanas se convocará a licitación pública para que otra compañía lo pueda finalizar.